Trabajar en equipo y hacer lluvia de ideas es fundamental a la hora de crear actividades o incluso soluciones en una determinada empresa. Por ello, la técnica de brainstorming se ha popularizado tanto en las organizaciones, porque las buenas ideas surgen cuando menos lo esperamos. Continúa leyendo para conocer en profundidad cómo poner en práctica esta técnica y recuerda que puedes especializarte con nuestro Máster en Innovación y Emprendimiento.
Índice de contenidos
La técnica del brainstorming
Como hemos mencionado anteriormente, el brainstorming hace referencia a una técnica usada para generar diversas y múltiples ideas dentro grupo de personas. Dichas ideas se utilizan como herramienta principal para lograr identificar las causas de un problema y sus posibles soluciones. También se usa para crear nuevos conceptos creativos, mejorar una idea inicial o crear un proyecto.
La primera vez que se utilizó este concepto fue en 1941. Álex Osborn, publicista, demostró que se obtenían resultados increíbles cuando se fomentaba la creatividad y las cualidades de cada uno de los individuos que trabajaban en un mismo entorno y con un mismo fin.
¿Por qué es útil para las empresas?
Principalmente, porque contar con diferentes ideas y puntos de vista ayuda a abarcar las múltiples soluciones que puede tener un problema. También porque cada persona es creativa a su manera, lo que conlleva a que un proyecto elaborado a través del brainstorming por diferentes personas sea más funcional y real. Además, dentro de las empresas, esta técnica se utiliza principalmente porque:
- Combate la monotonía laboral
- Fomenta la creatividad grupal e individual
- Genera un mejor ambiente de trabajo
- Permite que los componentes del grupo se expresen sin miedo y con total libertad, ya que nada es error o acierto
- Mejora la productividad
Cómo implementar las técnicas del brainstorming
Una vez aclarado el concepto, vamos a ver a continuación, cuáles son los pasos principales que hay que llevar a cabo para realizar una sesión de brainstorming,
- Lo primero de todo es dejar claro qué es lo que se pretende conseguir con esta actividad (crear una idea, identificar, solucionar un problema, etc.)
- El segundo paso, en caso de que la actividad sea en grupo, es nombrar la voz cantante, es decir, aquella persona que va a dirigir el ejercicio
- No todo el mundo sabe qué es el brainstorming, por ello en el punto número 3 hay que explicarle a los compañeros de qué trata esta actividad y cómo es el proceso
- En este punto ya se puede empezar a aportar ideas de manera libre y creativa. No olvidemos que las valoraciones y las críticas no sirven en estos ejercicios pues todo es válido para llegar a la conclusión final
- El siguiente paso es enumerar las distintas propuestas y eliminar aquellas que sean repetidas
- Cuando no se puedan aportar más ideas, se puede dar por finalizada la actividad
- El último paso es ordenar y analizar las propuestas para poder empezar a trabajar y comprobar su efectividad real
Sin embargo, las sesiones no tienen por qué ser siempre así. Cada caso es un mundo y, por ello, es imprescindible adaptarlas a cada empresa, departamento, proyecto o necesidad.